sábado, 4 de diciembre de 2010

Tortura (o "Tía, ¿verdad que usted también se durmió?")

¿A alguien con una brizna de no digo "amor por los niños", sino sentido común se le ocurriría llevar a un crío de la periferia y amante de Daddy Yankee,  al Teatro Municipal para ver "El lago de los cisnes"?



Bueno, con tres colegas llevamos a 200.
Y así nos fue.

Lo mejor, como todo el mundo sabe, fue el viaje:

- Ése es el Parque O'higgins... sí, donde está Fantasilandia... Ése es el Parque Forestal, el río Mapocho, la Vega Central, el Mercado... Allá se ve un pedacito del Cerro Santa Lucía... no, el zoológico está en el San Cristóbal... Premio para el que adivine qué edificio vamos a ver a la derecha, cuando lleguemos a la esquina...

- Tía, ¿usted conoce todo Santiago?
- Bueno, sí, más o menos... Perdón, lo que pasa es que siempre quise ser guía de turistas.

- ¡Chuaaaa!, la tía GPS...



Volvimos como con 205.
Temíamos perder a alguno por el camino.

1 comentario:

aleida-g dijo...

Apenitas la chingó con el lugar de destino, mmmm... recalculando !!!